Parece que las cosas comienzan a ir mal a la señora Merkel. Tiene los indices de popularidad muy lejos de lo que llegó a tener al principio de su mandato. Las vacas flacas asoman a lo lejos en el camino de los próximos meses. Un país que seguirá a la cola del crecimiento en Europa muy poco por encima del 2% en el PIB este año y con tasas de desempleo mejores, pero con panorama incierto cuando entren en vigor las nuevas medidas fiscales, de restricción del gasto y de reforma y disminuya el dinerito en el bolsillo de los ciudadanos...
No todo son malas noticias, esto puede ayudar al BCE a frenar la escalada de tipos que se viene produciendo en los últimos meses. Eso daría un respiro a nuestras hipotecas y nuestras inversiones :-) -por el momento-
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